Bollitos Suizos

Bollitos Suizos

Hoy hace un día de perros, bueno, todo el fin de semana ha estado igual, y según me ha dicho mi Pirata, toda la semana se espera con el mismo tiempo. Ufff, menudo levantazo, de frío, lluvia, y sobre todo viento, no me gusta nada!!!

Pero como hay que ver la parte buena de las cosas, y  precisamente son estos días los que apetece quedarse calentita en casa por la tarde, tomándote un café con leche (o un chocolate calentito si no estáis a dieta perpetua como yo!!), qué mejor acompañamiento para eso que unos bollitos suizos... doraditos por fuera y tiernos, tiernos por dentro, ummmm, una delicia, y recién hechos, mejor!!!

La receta en sí no tiene mucha complicación, si tenéis Thermomix o cualquier otra amasadora, mejor, pero si no es así no os preocupéis, se puede hacer a mano perfectamente. Si seguís los pasos de la receta y respetáis bien los tiempos de levado, os prometo unos bollitos esponjosos y con un sabor... delicioso!!!

Así que sin más dilación paso a  dejaros la receta...

Para la receta necesitaréis:

• 90g de leche entera
• 70g de azúcar
• 60g de mantequilla derretida
• 20g de levadura fresca de panadero
• 2 huevos grandes
• 325g de harina de fuerza
• 5g de sal
• 1 cucharada sopera de agua de azahar (opcional)
•  Huevo batido para pintar los bollitos
• azúcar humedecido con un poco de agua

Comenzamos!

Templamos la leche en el microondas (unos segundos son suficientes, no hay que calentarla mucho, sólo tiene que estar tibia) y en ella disolvemos la levadura de panadero.

En un bol ponemos la mantequilla derretida (no tiene que estar muy caliente), el azúcar y removemos bien.

Añadimos la leche, los huevos, el agua de azahar y batimos bien con unas varillas.

En otro bol ponemos la harina tamizada con la sal y formamos una especie de volcán y en el centro echamos el contenido del bol de los líquidos y mezclamos muy bien ayudándonos de una cuchara de madera.

Una vez tenemos todo bien mezclado, echamos la masa en la encimera a la que habremos espolvoreado un poco de harina (un pelín solamente) y nos ponemos a amasar. Si veis que la masa está un poco pegajosa y no os podéis hacer con ella, podéis añadirle un poco de harina, poquito, la suficiente para poder amasar bien, porque si os pasáis os puede quedar dura la textura del bollo al final y no es plan, no?

Amasar sin prisa, unos 5 minutos, hasta que os quede una masa elástica al tacto,(quizás necesitáis amasar un poco más, pero tenéis que conseguir esa textura elástica, y lisa, ok?). Formáis una bola,  la ponéis en un bol, que habréis untado con un poco de aceite previamente, y lo cubrís con film transparente. Ahora hay que dejarlo levar en un sitio sin corrientes de aire hasta que doble su volumen, será aproximadamente unas 2 horas, quizás más, depende del clima, en verano tardan menos en levar las masas, pero ahora con el frío tardan más, (yo lo dejo dentro del horno, eso sí, apagado eh???, cubierto con un paño de cocina limpio y seco). Esperamos....

Una vez doblado el volumen, la sacamos cuidadosamente del bol, y la depositamos en la encimera, que habremos espolvoreado de harina para que no se nos pegue. Amasamos un minuto para desgasificarla, y formamos  una especie de rulo para poder cortar las piezas más fácilmente.

Con la cantidad de masa de esta receta a mi me han salido 11 bollitos, de unos 60 o 62 gramos cada uno. Si tenéis balanza, pesáis cada pieza, si no, intentad a ojo que os queden más o menos iguales para que a la hora de hornearlos salgan todos uniformes.

Cogéis cada pieza y formáis bollitos redondeando la masa, los dejáis redonditos y bonitos. Los ponéis en la bandeja de hornear, cubierta de papel de horno para que no se os pegue, y separados unos de otros varios centímetros, ya que con el segundo levado aumentan de tamaño y se pueden pegar. Ahora, los cubrís con un trapo de cocina, y de nuevo a dejarlos levar. Esta vez el tiempo será más corto, en una hora o así ya habrán doblado su volumen.

Si los habéis metido en el horno, los sacáis, que nos va a hacer falta. Encendemos el horno y lo ponemos a 220º, calor arriba y abajo.

Con un cuchillo afilado (yo utilizo una cuchilla de las del rascador de la vitro) hacemos un corte a los bollitos, con decisión, sin miedo y no demasiado profundo. Después con una brocha de silicona, o la que tengáis, los pintáis con huevo batido, y ponéis por encima azúcar que habremos humedecido con unas gotas de agua. Lo del azúcar al gusto, yo le hecho mucho, quizás demasiado, porque me encanta, pero vosotros poned la que queráis.

Metemos al horno que ya tendremos caliente (yo meto la bandeja en el nivel 3) y horneamos 5 minutos, seguidamente bajamos la temperatura a 200º y horneamos 5 minutos más. Si veis que a los 5 minutos o así se están dorando demasiado, abrís un momento el horno y ponéis por encima papel de aluminio para que no se os tueste demasiado.

Ya está!! si podéis aguantar la tentación de pegarle un bocado aún calientes, dejad que se enfríen y... a disfrutarlos!!! (nosotros no pudimos, cuando empezamos a comérnoslos aun humeaban...ufff, somos así de impacientes, que le vamos a hacer!!!).

Os invito a que los hagáis, de verdad, no os vais a arrepentir, y ya me diréis si no son los mejores bollitos que habéis comido en vuestra vida!!!!

Me contáis???